Reintegrar la dimensión religiosa en víctimas de abusos sexuales por “perpetradores sagrados”

La dinámica del abuso sexual por “perpetradores sagrados” (católicos, judíos, musulmanes, budistas, chamanes …) es una lacra para las sociedades, una expresión de la irrupción del lado oscuro, sombra colectiva y personal y un reto para las psicoterapias. La víctima experimenta un mayor aislamiento y mayor nivel de trauma que en abusos por perpetradores no sagrados. El daño, presenta las señales habituales en las áreas de crecimiento psicosexual, desarrollo de la intimidad adulta, disociación, … y tiene un impacto específico en la devastación de la espiritualidad. “La oscuridad penetrando en cuerpos humanos” representa el poder de Satanás. En el artículo se van exponiendo datos sociales, antropológicos y clínicos de las particularidades del trauma tanto en los pacientes como en el terapeuta y en la relación terapéutica. Escuchar historias de vida tan complicadas y dolorosas, genera desazón en quien escucha y la activación de defensas, incluso hay una tendencia a identificarse con el perpetrador. De ese modo se puede revictimizar a las víctimas, lo que ocurre frecuentemente en contextos sociales. Los terapeutas pueden ser ubicados en roles de abusadores como respuesta contratransferencial. La psicoterapia con este tipo de víctimas forja al terapeuta, le obliga a hilar muy fino y revisar sus límites personales y su relación con el mal. “Está ligado al mal todo aquel que ha visto y no ha actuado”. Se exponen dos sueños de pacientes varones que sufrieron abusos sexuales. Se continúa con un análisis de los factores diversos que contribuyen al fenómeno de los abusos, algunos de más peso que otros dependiendo de las religiones, culturas y contextos. Estos factores se describen y analizan aportando argumentos de distintas disciplinas, entre ellos, y de modo preferente los junguianos. Un factor es que la dinámica de estos abusos se asemeja a la dinámica del incesto en un sistema familiar. El incesto está intensificado por la fusión de lo colectivo, divino, con la figura objetal del perpetrador. ¿Qué pasa cuando eres joven, y el diablo es un sacerdote? ¿Cómo va a impactar en su desarrollo moral e inclinación a la resolución violenta de los conflictos? La comunicación tiene como objetivo promover el debate, con una perspectiva crítica, para comprender algo más del fenómeno, discutir sobre las preguntas planteadas y propiciar otras nuevas.

Mikel García García, Médico. Psicólogo. Psicoanalista junguiano. Terapeuta Familiar Sistémico y Transpersonal. Procesos terapéuticos realizados: Psicoanálisis individual y grupal, Orgonterapia (terapia reichiana), y Psicología Analítica. Médico rural en Navarra. Psicólogo clínico en centros públicos de salud mental y en la unidad de hospitalización psiquiátrica de agudos de Osasunbidea en Navarra. Colaborador con ONGs médicas de intervención internacional, y en programas de salud comunitarios de diversas instituciones. Ha realizado diversos talleres clínicos para trabajar la muerte y publicaciones sobre la muerte. Adjudicatario del programa de “Maltrato Infantil y Desprotección de la Infancia” del Ayuntamiento de Donostia (San Sebastián, Guipúzkoa, 2001-2003). Doctorando en Estudios Internacionales de Paz, Conflictos y Desarrollo en la Universitat Jaume I (UJI Castellón). Experiencias tempranas de violencia. Desarrollo moral y actitudes hacia la paz.

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